Fruta prohibida

Tócame, una y otra vez. Tócame  sólo por placer. Besamé  enreda tu lengua con la mía y pacta con el diablo para sentirme de una manera distinta. Ya has visto cuan feliz puede hacerme tu risa y mis ojos brillantes observarte mientras hablas. Sabes que tenemos algo especial ¿Quieres materializarlo? Sin duda lo estabas esperando, porque es tu deseo carnal. Primero comienza por lo básico pero no me hagas desesperar. No dejes de besarme en los labios, no quiero enloquecer, no quiero acabar mal. Dame el placer que tu solo me puedes dar. Búscame en los sueños mientras nos abstraemos, mientras sentimos en profundidad lo que puede hacer psicologicamente el deseo. Lo que pueden hacer dos personas que acarician mutuamente su cuerpo.
Prueba mi fruta prohibida