Donde la imaginación pueda abrirnos un hueco, allí estaremos los dos. Donde la imaginación nos permita fantasear, tu podrás abrirme el corazón. Donde los sueños se cumplen, tú y yo podremos darnos amor. Pasando directamente de las cartas y alguna especulación. Seremos amantes de nombre, y se nos permitirá alguna que otra elección.
Mientras tanto aquí nos quedamos, tu por un lado y yo por otro esperando un milagro. Aquel que nunca pasa y que nos deja a cada uno en la otra orilla de un lago. Tú, tu vida y yo la mía y la incertidumbre entre ambos. La incertidumbre de si alguna vez podremos amarnos.
...Ni si quiera eres real, solo imaginación
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