"El que nada recuerda, nada puede desear"-Michael Ende.

jueves, 2 de agosto de 2012

La escapada


Realmente pensaba que era muy triste ser la persona a la que más solía mentirle. Ser mentida por mi misma era algo que solía hacer muy a menudo.
Cuando veía sus fotos.
"Puede haber chicos más guapos"
Cuando tenía noticias suyas
"Puede existir personas más interesantes
Cuando recordaba los sucesos que me acercaban a él estrepitosamente
"No lo quieres"
Mentira.
"Nunca lo amaste"
Más mentiras.
"Pasajero...sólo fue pasajero"
Voy a hacer llorar al Niño Jesús como siga haciendo esto.
Realmente no lo elegí. Me siento como si hubiera sido él, el que me eligió a mi para perseguirle allá donde fuese. Con la constante esperanza de algún día encontrarlo y que hubiera cambiado de idea respecto a mi. La eterna niña llorona que constantemente intenta cambiar de hábitos para ver si cambia de idea. La dulce por fuera y podrida por dentro. La que quiere y no puede. Soy la que ahoga el lamento. La que oculta llantos detrás de la sonrisa. Quien quiere complacerlos a todos para no sentirse vacía.
Vacio es lo que siento cada segundo que nose de ti. Oscuridad es lo que encuentro si sigo así. Condenada a no tener lo que quiero por no haber actuado a tiempo. Pidiendo clemencia ahí arriba sabiendo que no hay  nadie pueda escucharme.
Lamento tener solo una vida y me horroriza pensar que quizá sólo se pueda tener un amor verdadero. Y que este no pueda manifestarse y solo puede envolverme con su veneno.



No hay comentarios:

Publicar un comentario